[an error occurred while processing this directive] Nuremberg, crimenes de guerra, crimes contra la humanidad

Juicio a los Principales Criminales de Guerra Alemanes

En Nuremberg, Alemania
27 de febrero a 11 de marzo de 1946

Heptagésimo Séptimo Día: Viernes, 8 de marzo de 1946
(6 de 9)


[El Sr. JUEZ JACKSON continúa con su interrogatorio del General von Bodenschatz]

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P: ¿Y acusó Hitler a Goering de engañarle con respecto a la fuerza de las defensas aéreas de Alemania?

R: No sé si el Führer llegó a acusar al Reichsmarshal de alguna acción malintencionada en este aspecto. Las discusiones de Adolf Hitler con el Reichsmarshal fueron siempre, a pesar de toda la tensión, muy moderadas. Las críticas, supuestamente, no se volvieron más vehementes hasta 1944 y comienzos de 1945, pero yo no estuve presente ya que estaba retirado del servicio desde el 20 de julio de 1944.

P: Le he hecho una pregunta. No tenía intención de dar a entender que el Führer le acusara de alguna tergiversación intencionada, sino de que le había confundido, o que había sobreestimado la fuerza de las defensas aéreas alemanas. ¿No era lo que se decía comúnmente en su círculo?

R: La tergiversación está fuera de toda posibilidad. Los informes que la Fuerza Aérea entregó al Führer siempre fueron correctos. También se informó al Führer de las debilidades de la Fuerza Aérea.

P: ¿Cuáles fueron los esfuerzos que hizo Goering, que usted califica de enormes esfuerzos, para recuperar su influencia sobre el Führer?

R: El Reichsmarshal, cada vez que había reuniones, solicitaba a través de mi que se le permitiera participar. El Reichsmarshal comenzó a acudir con más frecuencia de lo habitual al Cuartel General del Führer, y además me dijo: "Haré todo lo posible para recuperar un contacto correcto con el Führer". Me lo dijo en persona.

P: ¿Y puso especial cuidado tras la primavera de 1944 en no hacer nada que ofendiera al Führer?

R: No puedo decir nada más sobre ese periodo porque por aquel entonces ya no estaba en activo. Ya no tenía contacto con él.

P: ¿Se convirtió en 1944 este bombardeo de ciudades alemanas en algo muy problemático desde el punto de vista de las críticas del pueblo alemán al gobierno?

R: El pueblo alemán sufrió terriblemente con estos bombardeos, y sólo puedo decir una cosa: que Adolf Hitler sufrió mucho por ellos. Las veces que estuve presente cuando se informaba del bombardeo de una ciudad alemana, estaba profundamente conmovido, al igual que el Reichsmarshal, porque el horror de un bombardeo de esa clase era indescriptible. He experimentado unos pocos bombardeos en Berlín, y todo el que los haya vivido jamás los olvidará en su vida.

P: Y esto se estaba volviendo muy embarazoso para Hitler y para el Reichsmarshal, tener que explicarle al pueblo alemán por qué estaba pasando esto.

R: No hacía falta explicarlo, porque el pueblo alemán lo vio. No se dio ninguna explicación. Sólo se dijo que se tomarían todas las medidas posibles para superar este peligro.

P: ¿Y sabían entonces usted y el Reichsmarshal que no se podrían tomar medidas que lo evitaran?

R: No, no, no. He destacado antes que era una guerra radio-técnica, y hubo momentos en los que, en la defensa, podíamos contrarrestar las medidas del enemigo a la vez que descubríamos nuevas formas de golpearle.

P: Cuando ustedes anunciaron al pueblo alemán que emplearían todos los medios necesarios, ustedes no tenían nada a su disposición que usted conozca para evitar el bombardeo de las ciudades alemanas.

R: Claro que los teníamos.

P: ¿Cuáles fueron, y por qué no se usaron?

R: Hubo, por ejemplo, los siguientes medios: las áreas más importantes estaban protegidas por artillería antiaérea. También había medidas radio-técnicas, transmisores

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de interferencias, que habrían hecho posible, y que en parte hicieron posible, interferir en los sistemas de radio de los aviones enemigos.

P: Las acciones destinadas a satisfacer al pueblo alemán bombardeado fueron un asunto que preocupó enormemente al Reichsmarshal, ¿verdad?

R: El Reichsmarshal ansiaba que la población fuera informada.

P: Y que se satisfaciera a la población, ¿verdad?

R: Es fácil decir "satisfacer". Él sólo podía garantizarle al pueblo alemán que haría todo lo que estuviera en su mano para responder a estos ataques.

P: ¿Vio usted al Reichsmarshal y a Hitler cuando llegaron los informes sobre el bombardeo de Varsovia, el de Rotterdam y el de Coventry?

R: No recuerdo que estuviera presente cuando llegaron esos informes.

P: ¿Debo interpretar eso como que nunca vio reacciones suyas a esos bombardeos?

R: Sólo sé que Varsovia era una fortaleza en la que se encontraba el Ejército Polaco con un gran número de efectivos y con excelentes piezas de artillería, que los fuertes tenían efectivos suficientes, y que Adolf Hitler anunció dos o tres veces que los civiles debían evacuar la ciudad. Se negaron. Sólo se evacuaron las embajadas extranjeras mientras estuvo allí un oficial con una bandera de tregua. El Ejército Polaco estaba en la ciudad, defendiéndola tenazmente con un círculo muy denso de fuertes. Los fuertes exteriores tenían un gran número de efectivos, y desde el interior de la ciudad se disparaba hacia las afueras con artillería pesada. Así, se decidió atacar la fortaleza de Varsovia, también con la Luftwaffe, pero sólo después de que se rechazara el ultimátum de Hitler.

P: ¿Y Coventry era una ciudad fortificada?

R: Coventry no era una fortaleza. Sin embargo, Coventry era una ciudad que albergaba las industrias clave de la fuerza aérea enemiga, en la que se construían los motores de los aviones, una ciudad en la que, que yo sepa, había muchas fábricas y se producían muchas partes de estos motores de aviones. En cualquier caso, la Fuerza Aérea recibió entonces órdenes de bombardear sólo los objetivos industriales. El que la ciudad también sufriera es comprensible, dados los medios de navegación del momento.

P: ¿Le interrogó en noviembre de 1945 el Coronel Williams?

R: Sí, fui interrogado.

P: ¿Y el Coronel Williams le hizo preguntas sobre ciertos incidentes ficticios ocurridos en la frontera germano-polaca a finales de agosto de 1939?

R: Sí, me hizo preguntas sobre eso.

P: ¿Y podría decirle al Tribunal qué sabía usted de los incidentes ficticios en la frontera polaca?

R: No sé nada realmente. El Coronel Williams me preguntó si supe de antemano del incidente de la Emisora de Gleiwitz. Le dije que no supe nada de eso. Lo único es que los incidentes de la frontera polaca fueron muy similares a los que ocurrieron en la frontera checa. Se podía suponer, y era sólo mi opinión, que fueron quizás deliberados. Pero no tenía pruebas palpables de que hubiéramos preparado nada.

P: ¿Le dijo el 6 de noviembre de 1945 lo siguiente?:

"Oí hablar de ello, pero personalmente en aquel momento tuve la sensación de que todas estas provocaciones que tuvieron lugar procedían de nuestro lado, del lado alemán. Como dije, no tenía pruebas reales de esto, pero siempre tuve esa sensación".
¿Dijo usted eso?

R: Sí, lo dije.

P: ¿Y que había hablado con otras personas sobre esto, diciendo que usted tenía esa sensación?

R: No lo recuerdo muy bien ahora mismo. Sólo sé que las noticias de la prensa me hicieron sospechar eso.

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P: ¿Le preguntaron, y respondió, lo siguiente?:
"Pregunta: ¿Pero opina usted que lo que se publicó en la prensa, y estos incidentes de los que se informó, no eran verdad, y que se hicieron meramente para provocar un incidente que justificara la invasión?"
Respondiendo usted:
"Tenía esa sensación. No podía probarlo, pero sin duda sé que tenía la sensación de que todo el asunto había sido fabricado por nosotros".
¿Respondió usted eso a esa pregunta?

R: Las actas lo dirán. Si está en las actas, es que lo dije. En este momento no recuerdo las palabras exactas.

P: ¿No niega entonces el hecho?

R: Tenía esa sensación, pero era una opinión totalmente subjetiva.

P: ¿Pero era su opinión?

R: Sí.

P: Entonces, le preguntaré si le interrogaron sobre el deseo del Führer de entrar en guerra con Polonia y si usted respondió esto:

"Caballeros, es muy difícil responder a esta pregunta, pero puedo declarar bajo juramento que el Führer realmente quería entrar en guerra con Polonia. Puedo probar que realmente quería una guerra de agresión contra Polonia a través del círculo que rodeaba al Führer, y las observaciones que se hicieron. Estuve presente la noche en la que Hitler le dio a Henderson sus condiciones y le dijo que quería Danzig, y concluí de todas esas reuniones del Führer con el embajador, me quedé con la impresión de que el Führer realmente no quería que los polacos aceptaran esas condiciones".
Y le pregunto si usted le dio esta respuesta al Coronel Williams

R: Puedo responder a eso de la siguiente manera.

No estuve presente en la reunión. Si lo dije, es que no me expresé correctamente. No estuve en la reunión del Führer con Henderson, pero estuve en la antecámara con los otros adjuntos, y desde el vestíbulo se podía oir a los diferentes grupos, unos diciendo una cosa, otros otra. De estas conversaciones deduje que las condiciones que debían cumplir los polacos que se comunicaron a Henderson esa noche, y el límite dado para responder a esas cuestiones, mediodía del día siguiente, era tan breve que se podía deducir que había una intención detrás de todo.

P: Bien, ¿cuál es la impresión que le quedó al estar en la antesala y oir a las personas que estaban con Hitler esa noche?

R: Estaban varios adjuntos, el Jefe de Prensa del Reich, y los caballeros que esperaban en la antesala sin participar en la reunión.

P: Para dejar esto muy claro, le haré una pregunta más sobre la parte de su interrogatorio dedicada a este asunto. ¿Le hicieron esta pregunta?:

"Entonces podemos resumir su testimonio de esta mañana diciendo que usted sabía en 1938, varios meses antes de que Alemania atacara a Polonia, que Hitler tenía intención de atacar Polonia y provocar una guerra de agresión. ¿Es correcto?"
¿Y contestó usted lo siguiente?:
"Sólo puedo decir con certeza que desde la noche en la que le dijo a Henderson que quería Danzig y el Corredor, desde ese momento tuve claro que Hitler tenía intención de provocar una guerra de agresión".
¿Le hicieron esta pregunta, y dio usted esta respuesta?

R: Si está en las actas, lo dije.

P: Bien, y si no estuviera en las actas, de todas formas es lo que usted ha declarado ahora, ¿verdad? Es un hecho, ¿cierto?

R: Mi definición es precisamente esta: que, dadas las exigencias que Adolf Hitler entregó a Henderson, y el escaso tiempo que se concedió a Henderson, concluí que había una intención clara. Esa es la forma en la que querría expresarlo ahora.

[Página 248]

P: Pediré que le muestren el documento 79-L, prueba USA 27. Testigo, ¿lo ha visto antes?

R: El Coronel Williams me mostró una copia de este documento, y le dije que no recordaba haber estado presente. Pero si mi nombre está en el acta, entonces es que estuve allí.

P: Pero su nombre está en el documento, ¿verdad?

R: Entonces, estuve allí. No recuerdo el tema de esta reunión. Le dije al Coronel Williams que con seguridad se trató lo ahí indicado, porque el Coronel Schmundt, cuya letra reconocí, me mostraron una copia, le dije que el Coronel Schmundt era un hombre muy concienzudo tomando notas.

P: ¿Todo esto está en su letra?

R: Así es, tal como lo veo aquí.

P: ¿Y lo firma el Coronel Schmundt?

R: Sí, lo firma el Coronel Schmundt, Teniente Coronel Schmundt. Las correcciones no están escritas con su letra.

P: ¿Pero la parte central del documento está escrita con su letra?

R: Sí, es su letra, lo sé, sí.

P: Y cuando el Coronel Williams le preguntó por esto, usted se tomó un tiempo para leerlo, y usted dijo: "Creo que los razonamientos aquí expresados son correctos; son los razonamientos que el Führer nos solía exponer en pequeños círculos". ¿Declaró eso usted?

R: Sí, eso dije, sí.

P: Y usted dijo: "No recuerdo si se dijeron estas cosas ese día. Sin embargo, es posible que los pensamientos aquí expresados sean los pensamientos de Adolf Hitler". ¿Le dijo eso al Coronel Williams?

R: Sí, le dije eso al Coronel Williams.

P: Eso es todo lo que quería preguntarle sobre esto, caballero.

Solicito ahora que le muestren la prueba original, el documento 798-PS, prueba USA 29.

R: Por lo que sé, el Coronel Williams también me mostró una copia de este discurso del Führer.

P: Cierto. ¿Dijo usted que no recordaba haber estado presente, pero que los pensamientos expresados...?

R: Los pensamientos expresados ahí son correctos.

P: Son correctos. ¿Eso es todo?

R: Sí, pero debo decir una cosa más. Intenté volver a hablar con el Coronel Williams, pero no pude ponerme en contacto con él. Es probable que yo asistiera a esta reunión.

P: Bien, anotaremos ahora esa declaración y le excusaremos de buscar al Coronel Williams.

Pediré ahora que le muestren el documento 3474-PS, prueba USA 580. ¿Es su letra?

R: Sí, es mi letra.

P: Y lo firma usted.

R: Sí.

P: ¿Es un acta de una reunión del 2 de diciembre de 1936?

R: Sí.

P: Usted preparó este memorándum para sus archivos, ¿verdad?

R: No sé a quién le di esto.

P: Bien, indica las actas de los archivos sobre esa reunión, ¿verdad?

R: Sí, es un acta de los archivos.

P: Goering estuvo presente en esa reunión. ¿Es eso correcto?

R: Sí. Debe haberla presidido. Indica aquí como presente al General Goering.

P: De hecho, el acta dice que la presidió, ¿verdad?

R: Sí.


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