Quincuagésimo Octavo Día: Miércoles, 13 de febrero de 1946
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Se reservó una habitación para desnudarse y otra para esperar; en una de ellas había una radio a todo volumen. Se hacía intencionadamente con el fin de que los prisioneros no descubrieran que les esperaba la muerte. Desde la segunda habitación pasaban de uno de uno por un pasadizo hasta una pequeña habitación vallada con una rejilla de hierro en el suelo. Debajo de la rejilla había un desagüe. En cuanto se asesinaba a un prisionero de guerra, dos prisioneros alemanes se llevaban el cadáver y se limpiaba la sangre de la rejilla.
En esta pequeña sala había una rendija en el muro, de unos 50 centímetros de longitud. El prisionero de guerra se tenía que poner apoyando la nuca sobre la rendija, y un tirador le disparaba desde la rendija. En la práctica este sistema no acabó siendo satisfactorio, dado que el tirador solía fallar. Pasados 8 días se empezó a usar un sistema nuevo. El prisionero, al igual que antes, era colocado apoyado contra el muro; después se bajaba lentamente una placa de hierro sobre su cabeza. El prisionero creía que se estaba midiendo su altura. La placa de hierro contenía una baqueta que se disparaba de repente y golpeaba al prisionero en la nuca. Caía muerto. La placa de hierro se manejaba con un pedal desde una esquina de la sala. El personal que trabajaba en la sala era del Sonderkommando mencionado anteriormente.
A petición del pelotón de ejecución, se me obligó a usar también a mi este aparato. Hablaré de esto más tarde. Los cuerpos de los prisioneros asesinados de esta forma eran incinerados en cuatro crematorios móviles transportados en remolques y arrastrados por camiones. Tenía que conducir continuamente del campo interior a la zona de ejecuciones. Tuve que hacer 10 viajes una noche con un intervalo de 10 minutos entre viaje y viaje. Fui testigo de las ejecuciones durante estos intervalos".
Los métodos y alcance de los asesinatos variaban. Los nazis se propusieron descubrir formas y maneras de exterminar masivamente y con rapidez a seres humanos. Dedicaron mucho tiempo a la solución de este problema. Dada su ambición, comenzaron a trabajar en la solución incluso antes del ataque a la Unión Soviética, inventando diferentes aparatos e instrumentos de asesinato, mientras habitantes pacíficos y prisioneros de guerra terminaban siendo víctimas de los ejecutores de Hitler.
Presento al Tribunal el informe de la Comisión Extraordinaria sobre las Atrocidades Alemanes en la República Socialista Soviética de Lituania. Es la prueba URSS 7. Aquí, al igual que en otros lugares, el exterminio masivo de prisioneros de guerra soviéticos formaba parte del plan salvaje de los agresores fascistas.
Citaré unas pocas frases de la página 6 de este documento. En su copia están marcadas con lápiz rojo, en la página 86 del libro de documentos:
La testigo Medishevskaja, informó a la Comisión de lo siguiente: 'Los prisioneros de guerra pasaban un hambre terrible; les vi arrancar hierba y comérsela' ". [Página 324]
Había en el campo del Fuerte nº 6 un 'hospital' para prisioneros de guerra que en realidad era un punto de transferencia del campo a las fosas. Los prisioneros de guerra arrojados en este 'hospital' estaban condenados a muerte.
Según estadísticas mensuales de enfermedad entre los prisioneros de guerra del Fuerte nº 6, de septiembre de 1941 a julio de 1942, en un periodo de sólo 11 meses, el número de prisioneros soviéticos muertos ascendió a 13.936".
Dado el total de prisioneros asesinados en el territorio de la República Soviética de Lituania, la Comisión escribe lo siguiente, las pocas líneas que voy a citar están también en la misma página 86 del libro de documentos:
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Hacia finales del verano de 1941, el Sonderkommando de la Policía de Seguridad de este campo estuvo exterminando a prisioneros de guerra rusos diariamente durante todo un mes. Paul Ludwig Gottlieb Waldmann declaró, encontrarán el fragmento que cito en la página 82, que:
"Los prisioneros de guerra rusos tenían que caminar un kilómetro desde la estación hasta el campo. En el campo permanecían una noche sin comida. A la noche siguiente se les conducía a la ejecución. Los prisioneros eran transferidos continuamente desde el campo interior en tres camiones, uno
de ellos conducido por mi. El campo interior estaba aproximadamente a 1,750 kilómetros del lugar de ejecución. La ejecución tenía lugar en barracones construidos recientemente para tal fin.
Aún faltaba un largo camino desde estos asesinatos individuales hasta las fábricas de muerte de Treblinka, Dachau y Auschwitz, pero la tendencia, la línea de actuación, son idénticas.
"En Kaunas, en el Fuerte nº 6 había un campo, el nº 336, para prisioneros de guerra soviéticos. Los prisioneros del campo eran sometidos a torturas crueles e insultos, cumpliendo estrictamente las inhumanas 'directrices para los supervisores y guardias de los destacamentos de trabajo'. Los prisioneros de guerra del Fuerte nº 6 estaban condenados a la inanición y a la muerte por hambre.
Me salto unas pocas frases y sigo leyendo:
"En la entrada del Campo nº 336 aún hay un panel con la siguiente inscripción en alemán, lituano y ruso: '¡Todos los que
mantengan contacto con prisioneros de guerra, especialmente los que intenten darles comida, cigarrillos o ropas de civil, serán fusilados!'.
Me abstendré de leer la lista de fosas abiertas. Tan sólo citaré la frase que indica la suma total de las fosas.
"En total, se enterró a 35.000 prisioneros de guerra en estas fosas según los documentos del campo".
Aparte del Campo nº 336, en la misma ciudad de Kauanas existió otro campo no numerado en el límite suroccidental del aeródromo. Se dice con respecto a este campo que:
"Al igual que en el Fuerte nº 6, el hambre, el látigo y la porra reinaban en este campo. Prisioneros de guerra exhaustos que ya no podían ni moverse eran llevados cada día fuera del reciento del campo, depositados vivos en fosas preparadas anteriormente, y enterrados".
Las últimas tres líneas de la columna izquierda, en la página 6 de la prueba URSS 7, página 86 de su libro de documentos, dicen lo siguiente:
"Los archivos, los documentos y los testimonios de testigos permitieron a la Comisión determinar que aquí, dentro del recinto del aeródromo, se torturó hasta la muerte y se enterró a cerca de 10.000 prisioneros soviéticos".
El informe menciona un campo más, el nº 133, cerca de la ciudad de Alitus, y unos pocos más creados en julio de 1941 y que se usaron hasta abril de 1943. En estos campos los prisioneros morían de frío. Tras descargarlos de los vagones de tren, los prisioneros de guerra que no podían caminar eran ejecutados allí mismo. El resto de prisioneros eran torturados hasta que perdían el conocimiento, los colgaban de los pies con cadenas, les hacían recobrar la conciencia tirándoles agua fría, y después se volvía a repetir todo el proceso.
"Se ha demostrado que al menos 165.000 prisioneros de guerra rusos fueron ejecutados por los alemanes en los campos antes mencionados de la RSS de Lituania".
El exterminio de prisioneros de guerra soviéticos se llevó a cabo literalmente en todos los campos. También perecieron miles de soldados soviéticos en el campo de exterminio de Majdanek. El segundo párrafo de la página 5 del comunicado conjunto polaco-soviético de la Comisión Extraordinaria, que les presento como prueba URSS 29, página 92 de su libro de documentos, dice que:
"Toda la historia salpicada de sangre de este campo comienza con el fusilamiento en masa de prisioneros de guerra soviéticos organizado por las SS en noviembre y diciembre de 1941. De un grupo de 2.000 prisioneros de guerra soviéticos, sólo sobrevivieron 80. Todos los demás fueron fusilados, excepto unos pocos que fueron golpeados y torturados hasta la muerte".
Entre enero y abril de 1942 se trajeron más transportes de prisioneros de guerra soviéticos al campo y fueron fusilados. Nedzeliak Jan, contratado en el campo como conductor de camión, declaró:
'Unos 5.000 prisioneros de guerra rusos fueron exterminados por los alemanes en el invierno de 1942 con el siguiente método: se les sacaba
de sus barracones en camiones y se les llevaba a fosas excavadas en una antigua cantera, y se les fusilaba en estas fosas'.